CHISTES: LA VENGANZA DE LOS GALLEGOS
IMITO 52 ANIMALES CON OBJETOS HOGAREÑOS. UNA RISA Este chiflado simpático, loco lindo, imito 52 animales y cosas raras en su casa con objetos del hogar. Empieza imitando a un koala, pasando por lagartos, mamÃÂferos de todo tipo, reptiles y otros animales mas. Muy divertido, para re� |
HERMOSO COMPILADO DE BEBES RIENDO SIN HERMOSO COMPILADO DE BEBES RIENDO SIN PARAR. NO HAY COSA MAS TIERNA QUE LOS BEBES Y SI LOS VES RIENDOSE A CARCAJADAS COMO EN ESTE VIDEO , SEGURO ES QUE TE CONTAGIARAN SU ALEGRIA, TERNURA Y HASTA BUENA ENERGIA.HAY TANTA PUREZA E INOCENCIA QU |
LA BROMA DE LA PUERTA QUE DESAPARECE A LA GENTE Esta puerta es algo inusual. Situada sola en un parque va a dejar atonitos a todos los que ven entrar a un hombre que desaparece. Incluso un hombre, llego a exclamar: especies de agujeros negros, mi esposa me estuvo hablando de esto. XD |
UN POCO DE HUMOR |
MI FACEBOOK PARECE EL RELOJ DE BEN 10 CADA SOLICITUD ES UN MONSTRUO DIFERENTE |
YO ME PREGUNTO ? ESA GENTE QUE NO ESTUDIA YO ME PREGUNTO? ESA GENTE QUE NO ESTUDIA Y APRUEBA, QUE COME Y NO ENGORDA,QUE TRABAJA Y NO SE CANSA...DE DONDE MIERDA SALIERON? A MI NO ME JODAS....SON EXTRATERRESTRES. JAJAJA!!!! A VECES NOS PREGUNTAMOS ESTAS COSAS Y NO NOS GUSTAN QUE PAS |
Los gallegos hartos de las bromas y chistes que los argentinos hacen de ellos decidieron vengarse.... Aquàva un anticipo de su venganza.
1. El médico y la enfermera en el hospital gallego contemplaban a los recién nacidos que dormÃÂan en la cuna. Entre todos estos recién nacidos, hay uno cuyos padres son argentinos. - ¿Usted serÃÂa capaz de adivinar cuál es el párvulo argentino, enfermera?- - Pero doctor, no hace falta adivinar. El infante argentino es aquél. El primero de la segunda fila-. - ¡Qué notable! ¿Y cómo lo ha sabido usted?- - ¡Hombre, sencillÃÂsimo! Es el primero que me cagó-.
2. El chico llegó casi llorando del colegio: -¿Qué te pasa, niño?- -Mamá, en el colegio me dijeron que si era judÃÂo no era argentino-. -No, mi vida. Vos sos judÃÂo y argentino-. -Bueno, pero entonces necesito saber qué soy más, ¿argentino o judÃÂo?- -¿Cómo qué sos más?- -SÃÂ... qué soy más, y...necesito saberlo!- -¿Para qué?- -Hay un chico que me quiere vender una bicicleta. Por eso quiero saber qué soy más-. -No te entiendo-. -Si soy más judÃÂo, voy y le regateo el precio, pero si soy más argentino, salgo esta noche y se la afano, ¿entendés?-
3. Adivinanzas: -¿Cómo llaman a los argentinos en Galicia?- -Ni idea-. -Espermatozoides-. -¿Por qué?- -Porque sólo trabaja 1 de cada 3.000.000-
4. Anécdota urbana: La ambulancia llegó velozmente a la escena del accidente de tránsito. Bajaron los enfermeros con una camilla. El médico se acercó al argentino que acababa de chocar y le dijo: -Cálmese. Pronto lo curaremos-. -¡Mi Mercedes! ¡Mi pobre Mercedes! ¡Cómo ha quedado mi Mercedes nuevo!- -Pero, ¡déjese de joder, hombre! OlvÃÂdese de su auto. ¡Su brazo izquierdo ha quedado aplastado!- -¡Oh, no! ¡Mi Rolex! ¡Mi pobre Rolex!-
5. Un argentino llevaba ya 20 años viviendo en La Coruña. Un dÃÂa decide visitar al psicoanalista. -Mire, doctor, lo mÃÂo es muy grave. Siento que perdàla identidad argentina. Siento que soy gallego-. -¿Cómo lo afecta esto?- -Y… me afecta muchÃÂsimo. Cuando escucho un tango, me paro a bailar y termino bailando una muñeira. Si, por ejemplo, tengo ganas de comer un asado, termino pidiendo pulpo…- -Pierda cuidado. Esto tiene fácil solución-. -¡No me diga!- -SÃÂ. En media hora estará usted curado-. -¿Y cómo va a hacer, doctor?- -Lo hipnotizaré-. -¡Gracias, doctor! ¡No sabe cuánto se lo agradezco! ¡Gracias, gracias!- Con habilidad, el psicoanalista lo hipnotizó y le hizo repetir: -¡Soy argentino! ¡Soy argentino! ¡Soy argentino!- Exactamente media hora después lo sacó del estado hipnótico. -Veamos, ¿se siente usted bien ahora?- -¿Y a vos qué te importa, gallego pelotudo?-
6. El argentino intenta comprar en Galicia unos cigarrillos. -Bueeeenas. ¿Vos sos el dueño de este quiosco?- -Buenos dÃÂas tenga usted, señor. Verá: esto no es un quiosco, aquàlo llamamos estanco-. -Esteeeeee, a ver, dame cigarrillos de…- -¡Que no los llamamos cigarrillos! Los llamamos pitillos-. -Bueno, y dame también unos fósforos-. -Aquàno los llamamos fósforos, sino cerillas- -Está bien. Dame unos encendedores-. -Que aquàno los llamamos encendedores. Los llamamos mecheros-. -Decime viejo, ¿y cómo llaman aquàa los hinchapelotas?- -No los llamamos. Vienen solos desde Buenos Aires, por AerolÃÂneas Argentinas...-
7. EL TAXISTA Un hombre vuelve de un viaje de negocios, un dÃÂa más temprano de lo previsto. Es tarde y toma un taxi. Cuando está llegando a su casa le pregunta al chofer si quiere ser testigo de lo que va a encontrar, ya que piensa que su mujer lo engaña, y que en este momento está con su amante. El chofer, que es argentino, acepta ser testigo a cambio de 100 dólares. Entran sin hacer ruido, abren silenciosamente la puerta del dormitorio, el marido enciende la luz y corre de un tirón las sábanas de la cama. Y, tal como lo imaginaba, descubre a ambos, mujer y amante. Fuera de sàsaca su pistola y coloca el cañón en la sien del amante, pero la mujer grita: -¡No, no dispares, no dispares, por favor ! ¡ Te mentÃÂ! ¡ Nunca recibàuna herencia de mi tÃÂa! Fue él quien pagó la 4 x 4 que te regalé, nuestro yate, también nuestra casa en el lago, nuestras vacaciones y el colegio de los niños. ¡Hasta paga nuestras compras en Carrefour! El marido, fuertemente impactado por esa revelación, baja la pistola, se vuelve hacia el taxista y le pregunta: -Y Ud., en mi lugar, ¿qué harÃÂa ?- - Yo volverÃÂa a taparlo... ¡ no sea cosa que se resfrÃÂe !-